Con el país enfrentándose a una contracción económica prevista del -4,8% en 2025 según el FMI, varias empresas internacionales, como la india Soma y la turca Albayrak, ya se están posicionando para invertir fuertemente en este sector, prometiendo no sólo impulsar el crecimiento sino también crear miles de puestos de trabajo.
Las autoridades ecuatoguineanas estudian fórmulas para diversificar la economía del país. Una de las soluciones que se barajan es la creación de zonas industriales (ZI). El tema fue tratado durante una audiencia concedida por el Primer Ministro, Emmanuel Osa Nsue, a una delegación de la Confederación de Empresarios de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP). La presidenta de esta organización, Nelma Fernández, y su anfitrión abordaron "la importancia de la creación de zonas industriales para diversificar la economía nacional, dado que se trata de una zona que concentra un gran número de empresas industriales, principalmente del sector secundario o terciario, constituido en su mayor parte por fábricas e industrias", según informa la Oficina de Prensa e Información de Guinea Ecuatorial.
En Malabo, las autoridades han tomado la medida de lo que está en juego en torno a este asunto. Desde hace algún tiempo, los inversores de Guinea Ecuatorial se posicionan para la construcción de una zona industrial. Es el caso de la india Soma, que tiene previsto invertir 123,4 millones de euros (81.000 millones de francos CFA) en 6 proyectos emblemáticos en el país, entre ellos una zona industrial en Djibloho. La turca Albayrak proyecta construir una zona industrial en Ebibeyin, en el marco de su contrato de concesión para gestionar los puertos de Bata y Malabo.
Situación de crisis
La propuesta de crear las ZI para diversificar la economía, llega en un momento en el que el país atraviesa una difícil situación económica. Según las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) en su informe "Perspectivas Económicas Regionales: África Subsahariana, octubre de 2024", Guinea Ecuatorial experimentará un crecimiento del -4,8% en 2025, frente al 5,8% en 2024 y el -6,2% en 2023. Esta recesión podría explicarse por el hecho de que la economía ecuatoguineana se basa en gran medida en el petróleo (los ingresos del petróleo representan más del 90% de los ingresos públicos de Guinea Ecuatorial, nota del editor). El negocio del oro negro se enfrenta a la volatilidad de los precios a escala mundial, pero también a una caída de la producción a escala nacional.
La producción de petróleo de Guinea Ecuatorial ha ido disminuyendo desde 2022, cuando se situó en 118.000 barriles/día, frente a los 140.000 de finales de 2021 y los 306.000 de 2010, lo que supone una caída media del 7,4% anual. Para 2024 en concreto, la Ley de Finanzas prevé una producción de 70.000 barriles de petróleo al día, con unos ingresos petroleros que alcanzarán los 1.235.300 millones de francos CFA, lo que representa el 80,5% de los recursos del Estado. Peor aún, el FMI ha previsto una caída de la producción del 50% entre 2024 y 2028. Esto está relacionado con "la maduración de los pozos petrolíferos y un accidente en el principal yacimiento petrolífero del país (el yacimiento de Zafiro, nota del editor), que redujo la producción en dos tercios", explicó la institución de Bretton Woods.
En la fotografia de cabecera: Le Premier ministre de la Guinée Equatoriale remettant un cadeau à la présidente de la Cplp