El reciente historial de Guinea Ecuatorial en materia de derechos humanos es muy preocupante, ya que el país parece estar socavando la independencia de la profesión jurídica.
Development Diaries informa de que dos abogados, Gemma Jones y Angel Obama han sido suspendidos arbitrariamente por sus esfuerzos por defender los derechos humanos y denunciar las injusticias.
Según un informe de Amnistía Internacional, en los últimos meses se ha hecho un uso indebido de la institución para atacar a los dos abogados defensores de los derechos humanos.
El informe también revela que el Colegio de Abogados, que se supone que debe proteger a los abogados, se ha convertido en una herramienta de represión política.
Suspender a abogados que abogan por un poder judicial independiente sólo demuestra que el gobierno del país está violando los principios mismos del Estado de derecho y el acceso a la justicia, que son fundamentales para defender los derechos humanos.
Es evidente que existe una pauta de utilización de mecanismos legales para reprimir la disidencia e impedir que los defensores de los derechos humanos desempeñen sus funciones.
La obligación de Guinea Ecuatorial como Estado Parte en tratados internacionales, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, exige que defienda la independencia de su poder judicial y de su profesión jurídica.
Sin embargo, las acciones contra Jones y Obama demuestran que el gobierno está incumpliendo estos compromisos.
Además, los estrechos vínculos entre la dirección del Colegio de Abogados y el gobierno en el poder suscitan serias preocupaciones por la falta de independencia institucional, que deja a los abogados indefensos frente a las represalias políticas.
Es necesaria una acción inmediata para salvaguardar los derechos de los abogados de derechos humanos en Guinea Ecuatorial.
Los organismos internacionales, como las Naciones Unidas y la Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, deben intensificar la presión sobre Guinea Ecuatorial para que respete sus obligaciones en virtud de los tratados de derechos humanos.
Development Diaries pide al gobierno que anule las injustas suspensiones de Jones y Obama y garantice que pueden continuar su trabajo sin temor a sufrir más acoso.
Además, Guinea Ecuatorial debe tomar medidas concretas para reformar el Colegio de Abogados, garantizando que funcione con independencia de influencias políticas, como exigen las normas jurídicas internacionales.
Esto es esencial para la protección de los profesionales del derecho y también para garantizar que los ciudadanos tengan acceso a una representación legal y una justicia justas.
Fuente fotográfica: Amnistía Internacional
Equatorial Guinea: Stop Harassment of Human Right Lawyers (developmentdiaries.com)