Guinea Ecuatorial, cuya economía entrará en recesión en 2023 tras una caída del 12,8% de su PIB petrolero, está haciendo todo lo posible para reactivar su producción de petróleo, que se encuentra en su nivel más bajo desde 2021, tras haber pasado de 300.000 b/d en 2010 a algo menos de 100.000 b/d en los últimos tres años. El Presidente de la República, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, que se reunió con el Presidente ruso Vladimir Putin en Mascou el 26 de septiembre, expresó a este último su deseo de que la compañía estatal rusa de petróleo y gas Gazprom se instale (por fin) en su país. Esta petición se produce pocos días después del anuncio oficial de la salida del gigante norteamericano ExxonMobil del país, motivada por el progresivo agotamiento del yacimiento petrolífero de Zafiro que explotaba desde hacía unos treinta años. El dirigente ecuatoguineano también está haciendo ojitos a una empresa estratégica rusa, Lukoil, presente en el Congo, donde posee una participación del 25% en el proyecto Marine XII, que comprende 5 de los mayores yacimientos de petróleo y gas del país.
Tras fracasar en su intento de implantarse en Chad en 2012, Gazprom, que importa gas natural licuado de Camerún -34.050 millones de pies cúbicos a finales de junio de 2024- y que ya renunció a explotar 2 permisos en Guinea Ecuatorial en 2010, podría dar el salto esta vez, en un contexto en el que Rusia parece decidida a reforzar sus compromisos petroleros en la subregión y aumentar su influencia geopolítica allí. La cuestión que se plantea en este momento es el papel que esta megacompañía y su consorte privado Lukoil van a desempeñar en la escena petrolera y gasística de Guinea Ecuatorial. Antes de marcharse, ExxonMobil firmó un acuerdo con el gobierno de Guinea Ecuatorial para transferir todos sus activos a GEPetrol, la compañía petrolera nacional. Este acuerdo sitúa a la empresa estatal en el centro del juego en lo que se refiere a la explotación de los recursos de petróleo y gas del país. Además, para apoyarle en su proyecto de " construir un sector de hidrocarburos de categoría mundial ", el Estado ecuatoguineano ha anunciado que se apoyará en la experiencia de varios productores independientes, como Kosmos Energy, Africa Oil Corp, Panoro Energy, Trident Energy, así como Chevron y Marathon Oil, EG LNG (gas natural licuado).En
Guinea Ecuatorial, poner en marcha nuevos yacimientos e impulsar la producción nacional es una cuestión de supervivencia. El gobierno se encuentra en una carrera contrarreloj, haciendo todo lo que está en su mano para evitar el peor escenario previsto por el Fondo Monetario Internacional (FMI), a saber, que la producción de petróleo del país podría caer un 50% entre 2024 y 2028. El Ministro de Hidrocarburos y Desarrollo Minero, Antonio Oburu Ondo, sostiene además que el antiguo yacimiento de Zafiro, renovado por ExxonMobil, es "superproductivo". Las autoridades ecuatoguineanas, que sostienen que el potencial del sector de los hidrocarburos es muy elevado, afirman estar trabajando para hacerlo más atractivo. Para ello, han introducido una serie de medidas destinadas sobre todo a aumentar la rentabilidad para los inversores. En el ámbito fiscal, por ejemplo, las reformas que han entrado en vigor este año incluyen: una reducción del impuesto de sociedades del 35% al 25%, una reducción del impuesto sobre los dividendos del 25% al 10%, entre otras reformas destinadas a aumentar la seguridad "para los inversores estadounidenses a través de mejores rendimientos".