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Al informar a los embajadores, Karim Khan destacó la urgente necesidad de justicia y rendición de cuentas ante la escalada de violencia y sufrimiento humanitario.
"La criminalidad se está acelerando en Darfur. Los civiles están en el punto de mira, las mujeres y las niñas son objeto de violencia sexual y comunidades enteras han quedado destruidas", afirmó.
"Esto no es sólo una evaluación; es un análisis basado en pruebas verificadas".
La violencia en Darfur ha desplazado a miles de familias y devastado la región, con ataques a infraestructuras civiles vitales, civiles muertos y comunidades que padecen hambruna y enfermedades.
Profundización de la crisis
La gravedad de la situación en la región fue subrayada por el secretario general de la ONU, António Guterres, quien condenó el ataque perpetrado el 24 de enero contra el Hospital Universitario Saudí de El Fasher, en Darfur del Norte.
Según los informes, al menos 70 pacientes y sus familiares murieron, y decenas más resultaron heridos.
"Este atroz ataque que ha afectado al único hospital en funcionamiento de la mayor ciudad de Darfur se produce después de que más de 21 meses de guerra hayan dejado en ruinas gran parte del sistema de atención sanitaria de Sudán", ha declarado Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general, en un declaración.
El Secretario General reiteró que el derecho internacional humanitario exige la protección de las instalaciones y el personal médicos y que el ataque deliberado contra dichas instalaciones puede constituir un crimen de guerra.
También renovó su llamamiento al cese inmediato de las hostilidades y a un diálogo político sostenible e integrador para poner fin al conflicto.
Ecos de crímenes pasados
El Sr. Khan instó al Consejo de 15 miembros a volver a comprometerse con los principios esbozados en la resolución 1593, adoptada hace 20 años, que remitía la situación de Darfur a la CPI.
"Oímos los ecos que dieron lugar a la remisión original", dijo, advirtiendo de que una nueva generación está sufriendo las mismas atrocidades que padecieron sus padres.
El fiscal de la CPI anunció que su oficina está preparando solicitudes de nuevas órdenes de detención relacionadas con presuntos crímenes cometidos en Darfur Occidental.
Hizo hincapié en que estas solicitudes sólo procederían con pruebas sólidas para garantizar una perspectiva realista de condena, reforzando el compromiso de la CPI con la justicia para las víctimas.
El Sr. Khan también subrayó la necesidad de una mayor cooperación en el traslado de fugitivos de la CPI, entre ellos el ex presidente Omar al-Bashir y otros altos cargos acusados de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Deja vu
El fiscal de la CPI también pintó un panorama sombrío del panorama humanitario y de seguridad de Darfur.
"Las mismas comunidades atacadas hace 20 años sufren hoy, con crímenes que se utilizan como armas de guerra", declaró el Sr. Khan, subrayando que tales actos violan el derecho internacional humanitario y exigió el cese inmediato de la violencia.
El juicio de Ali Kushayb
Khan también destacó la importancia del juicio de la CPI contra Ali Muhammad Ali Abd-Al-Rahman, también conocido como Ali Kushayb, por los crímenes cometidos en 2003 y 2004.
Este juicio ha demostrado a la población de Darfur que no está olvidada y que "no ha sido borrada de la conciencia pública", dijo, destacando los esfuerzos realizados por los propios darfuríes para garantizar la justicia y la rendición de cuentas.
Khan concluyó subrayando la responsabilidad moral y legal de la comunidad internacional de hacer justicia.
"La población de Darfur está en peligro y tiene derecho a la justicia. Ha llegado el momento de cumplir la promesa de la resolución 1593", dijo.
"Es hora de que unamos nuestras manos colectivamente y cumplamos esa promesa para evitar este ciclo constante de desesperación que han sufrido generaciones de darfuríes".
Darfur: ICC Prosecutor urges immediate action to address atrocities | UN News
Imagen de portada: UNICEF/Annadjib Ramadane Mahamat . La violencia en Darfur ha desplazado a decenas de miles de familias. En la imagen, refugiados de Darfur Occidental llegan a Chad.
