La Presidencia francesa declaró que la visita tiene por objeto impulsar la cooperación entre ambos países, al tiempo que se abordan los principales asuntos regionales e internacionales. El Presidente Lourenço se prepara para asumir la presidencia de la Unión Africana en febrero, un tema clave para las conversaciones.
Uno de los temas clave de la agenda es el conflicto entre Ruanda y la República Democrática del Congo.
Macron, que visitó Angola en marzo de 2023, ha reiterado su apoyo a los esfuerzos de Lourenço como mediador clave;
Desde noviembre de 2021, el movimiento armado M23, se ha apoderado de amplias franjas de territorio en el este de la RDC, rica en recursos naturales y desgarrada por conflictos desde hace 30 años.
Ruanda niega apoyar al M23 y afirma que su objetivo es hacer frente a las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), un grupo armado compuesto principalmente por militantes hutus formado tras el genocidio ruandés de 1994.
En diciembre, los presidentes congoleño, Félix Tshisekedi, y ruandés, Paul Kagame, iban a reunirse en Luanda para mantener conversaciones de paz, pero ambas partes no lograron ponerse de acuerdo sobre los términos, lo que llevó a una cancelación de última hora.
Diversificar la economía
En el plano económico, está previsto que durante la visita de Lourenço a París se firmen contratos por valor de más de 430 millones de euros.
Aunque el comercio entre Francia y Angola ha estado dominado por el sector de los hidrocarburos, Angola se dirige ahora a Francia para que le ayude a diversificar su economía.
Lourenço asistirá el viernes alForo Empresarial Angola-Francia que reunirá a empresas de ambos países en la sede del Medef, la patronal francesa.
Se espera que la empresa francesa Suez formalice la firma de un importante contrato de tratamiento de aguas residuales en Angola.
También se espera que se concluya la financiación entre el banco francés Société Générale y las autoridades angoleñas para la compra de un satélite de observación de la Tierra que fabricará Airbus en Toulouse (suroeste de Francia).
Para Angola, el objetivo es cartografiar sus recursos petrolíferos y minerales, pero también el agua para la agricultura.
Está prevista la firma de un acuerdo preliminar con la Agencia Francesa de Desarrollo sobre un enorme proyecto de irrigación, mientras prosigue la cooperación para reconstruir el sector cafetero.
Las conversaciones se centrarán también en el proyecto de línea ferroviaria del corredor de Lobito, destinado a transportar los minerales extraídos en la RDC y Zambia hasta el océano Atlántico.
Potencial y riesgos
Para Sergio Calundungo, coordinador del Observatorio Político y Social de Angola, el Corredor de Lobito tiene un gran potencial y representa una ventaja económica no sólo para Angola, sino para los países de la región, especialmente para la RDC y Zambia.
Sin embargo, advierte que existen riesgos potenciales asociados a este tipo de desarrollo, que ha atraído el interés de inversores estadounidenses y europeos.
"Estamos hablando de riesgos de naturaleza medioambiental, porque tendrá mucha infraestructura, mucho equipamiento, en una zona que fue abandonada a su suerte y durante tanto tiempo y no tuvo mucha intervención humana", dijo al servicio portugués de RFI.
También existe el riesgo de malestar social, explica. "Creo que debemos asegurarnos de que todas estas inversiones no se traduzcan en invasiones de tierras, conflictos, disputas por el acceso a la tierra, el acceso al agua, el acceso a otros recursos con las comunidades locales", afirma.
En otro orden de cosas, Angola estudia pedir a la Compañía Francesa de Equipos Hospitalarios que abra un hospital oftalmológico en la capital.
Angola and France to sign €430m in contracts during Lourenço state visit
En la fotografia de cabecera: El presidente angoleño Joao Lourenco estrecha la mano del presidente francés Emmanuel Macron tras su rueda de prensa conjunta en el Palacio del Elíseo el 16 de enero de 2025. AFP - AURELIEN MORISSARD