(Abandonados, esperan ayuda del gobierno)
Guinea Ecuatorial, bis repetita. Los benineses se encuentran de nuevo en apuros. Esta vez no se trata de benineses confinados a la fuerza por sus papeles, sino de emigrantes que soñaban con llegar a Gabón y cuyo barco, en apuros, encalló en la costa ecuatoguineana tras días terribles en alta mar.
Su historia parece sacada de una película de acción. Un proyecto de inmigración que se convierte peligrosamente en una aventura de alto riesgo. Salieron de Cotonú en barco, soñando con llegar a Gabón, donde podrían realizar los trabajos que quisieran para llegar a fin de mes. Pero, por desgracia, la embarcación improvisada que los transportaba nunca llegó a la costa gabonesa. En medio del océano, el improvisado conductor o capitán informó de que le faltaba combustible. Tras algunos intentos desesperados por volver a arrancar el motor, abandonó el barco con el pretexto de ir en busca del preciado líquido para volver a poner en marcha la embarcación. Pero sus 90 pasajeros, 54 de ellos de Benín, no volvieron a encontrarlo. Pasaron 20 días en el barco sin comida ni agua. Uno de ellos, una mujer de Benín, perdió la vida y su cuerpo fue arrojado sin piedad al mar. El resto, los supervivientes, se salvaron gracias a las olas que empujaron la embarcación hacia la costa de Guinea Ecuatorial, donde los guardacostas los rescataron y los trasladaron a la gendarmería de Nkuantoma, en la ciudad de Bata, donde estaban retenidos. Alertados de la situación, el cónsul y los ciudadanos benineses presentes en el lugar acudieron en su ayuda, llevándoles alimentos, medicinas y ropa. Aunque muchos de ellos siguen en una situación psicológica precaria, todos se encuentran bien. "Las autoridades ecuatoguineanas no quieren cargar con sus vidas in situ", afirma una fuente que sigue de cerca la situación. Del mismo modo, "están pidiendo a las autoridades beninesas, a través del consulado, que compren billetes de avión para repatriarlos a Benín", añade la misma fuente. Desde entonces, las autoridades beninesas también han tardado en responder, dejando a 54 benineses residentes en Guinea Ecuatorial detenidos en Bata, a la espera de sus billetes para regresar a casa.
En la fotografia de cabecera: Marcel Zoumenou
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