El presidente senegalés, Diomaye Faye, ha pedido este jueves a Europa que contribuya más a la lucha contra la inestabilidad en el Sahel, durante una reunión con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, quien expresó la voluntad de su país de comprometerse con la región.
«La situación en el Sahel frente al terrorismo exige una movilización global de la comunidad internacional, y sobre todo de Europa, al lado de los países afectados, porque es bien sabido que los continentes africano y europeo comparten un destino común en materia de seguridad», declaró Faye en una declaración a la prensa en Dakar.
En julio, la organización regional Cedeao nombró a Faye mediador para el regreso a su seno de Mali, Burkina Faso y Níger, tres países asolados por el yihadismo y la violencia en los que los militares han tomado el poder por la fuerza desde 2020. Senegal limita con Mali. Sánchez acogió con satisfacción el esfuerzo de mediación. El Sahel «tiene una importancia estratégica» para España y «por ello queremos contribuir a su estabilidad y prosperidad», dijo.
Estos tres Estados sahelianos han roto varias veces con los países occidentales, y en enero abandonaron la Cedeao, a la que acusan de estar supeditada a la antigua potencia colonial francesa y de no apoyarles contra el yihadismo, y crearon su propia alianza. Política y militarmente, se han vuelto hacia Rusia. Senegal fue la tercera y última parada de la gira de tres días de Sánchez por África Occidental, cuyo principal objetivo era contrarrestar el espectacular aumento de la inmigración ilegal en su país.
El martes y el miércoles, España firmó acuerdos de «migración circular» con Mauritania y Gambia, estableciendo un marco concertado para la entrada regular en España en función de las necesidades laborales. España y Senegal ya estaban vinculados por acuerdos de regulación migratoria. Sánchez anunció la firma de un nuevo acuerdo con Senegal, que abarca nuevos sectores de actividad e incluye formación para los trabajadores senegaleses que se desplacen a España.
Senegal es uno de los principales puntos de partida de los miles de africanos que desde hace años emprenden la peligrosa ruta atlántica para intentar llegar a Europa, principalmente a través del archipiélago español de las Islas Canarias. El miércoles por la noche, el ejército senegalés anunció otra operación de rescate frente a las costas de Marruecos de una embarcación que transportaba a 41 migrantes, entre ellos 28 malienses, 12 senegaleses y un marfileño.
En la fotografía de cabecera: El presidente senegalés Bassirou Diomaye Faye en en palacio presidencial de Dakar, el 3 abril 2024. REUTERS / Abdou Karim Ndoye
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