Published On 1 May 20241 May 20
Estados Unidos se dispone a retirar a más de 1.000 militares de Níger, otrora socio de primera línea en su guerra contra el grupo ISIL (ISIS, por sus siglas en inglés) y las filiales de Al Qaeda en la región africana del Sahel, que actualmente experimenta un repunte de violencia mortífera.
Níger ha anunciado en marzo que rompía su acuerdo de defensa con Estados Unidos "con efecto inmediato".
El Departamento de Estado estadounidense confirmó que funcionarios nigerinos se reunirían con sus homólogos norteamericanos el jueves para discutir "una retirada ordenada y responsable de las fuerzas estadounidenses".
La ruptura no es ninguna sorpresa. El gobierno militar, instaurado durante un golpe de Estado el año pasado, y los Estados Unidos estaban destinados a ser siempre incómodos compañeros de cama al decir de los expertos.
Además, la Junta habia marcado el tono de las relaciones con Occidente a finales del año pasado, cuando mostró la puerta de salida a 1.500 soldados franceses.
Ahora, Rusia ha entrado en escena. Los mercenarios Wagner, financiados por el Estado, ya estaban profundamente arraigados en África antes de que su difunto líder, Yevgeny Prigozhin, marchara sobre Moscú el año pasado. Ahora, en un claro intento de borrar ese capítulo de la historia, el grupo se ha rebautizado como "Africa Corps" y un equipo de sus instructores militares ha visitado recientemente la capital de Níger, Niamey, con material para construir una base de defensa aérea.
Níger es uno de los países más pobres del mundo y su ejército está sumido en conflictos con grupos armados a pesar de más de una década de presencia estadounidense.
Para la junta, la llegada de Rusia anuncia el comienzo de una nueva era de relaciones potencialmente más fructíferas -y posiblemente más igualitarias- con las naciones extranjeras.Parece que la población local está de acuerdo.
"La Junta ha ganado también la batalla de la opinión", afirma Ibrahim Yahaya, subdirector del Proyecto Sahel del International Crisis Group, una ONG dedicada a la prevención y resolución de conflictos armados. Yahaya, originario de la ciudad de Zinder, ha sido testigo de cómo los jóvenes y los descontentos aprueban las "complicadas decisiones " de la junta, incluso a pesar de que sus vidas se hagan más difíciles bajo las sanciones impuestas en la región y por los recortes de ayuda impuestos tras el golpe de Estado del año pasado. "Las potencias occidentales han disfrutado de bastante libertad de acción a la hora de influir e inmiscuirse en los asuntos locales", declaró a Al Jazeera.
"Y ahora [los nigerinos] tienen una junta que está poniendo fin a todo eso. Así pues, se trata de una despedida no muy cordial de Estados Unidos, que al parecer está realizando un esfuerzo de última hora para convencer a los generales de que sus tropas deben permanecer en el país.
¿Cómo se han torcido tanto las cosas y cuál es el futuro de Níger? ¿Cuál era la situación en Níger antes del golpe?
Hace menos de un año, Níger estaba gobernado por Mohamed Bazoum, el "chico de los carteles occidentales". "Pero no todo era un jardín de rosas", afirma Simon Rynn, investigador principal sobre seguridad africana en el Royal United Services Institute (RUSI), un think tank con sede en Londres.
Bazoum, antiguo profesor, fue elegido en 2021, en el primer traspaso de poder pacífico desde la independencia del país en 1960. Alabado por sus credenciales democráticas, ofreció una base para que Francia, Estados Unidos y, en menor medida, Italia y Alemania pusieran en marcha campañas de seguridad para frenar el auge de los grupos armados en toda la región del Sahel, utilizando la ayuda militar para reforzar las fuerzas militares de Níger.
A pesar de sus esfuerzos por introducir reformas, como la promoción de la educación de las niñas, le costó deshacerse del legado de su Partido Nigerino para la Democracia y el Socialismo, que estuvo 12 años en el poder hasta el golpe de 2023, pero que durante mucho tiempo fue criticado por la represión y la corrupción. Él mismo prohibió las protestas de 2022, desencadenadas inicialmente por la subida de los precios del combustible, que llevaron a un punto de ebullición el sentimiento antifrancés generalizado.
¿Qué cambió tras el golpe?
Ostensiblemente, los generales golpistas afirmaron que su prioridad era proteger al país de la creciente situación de inseguridad. Pero Abdourahmane Tchiani, entonces jefe de la guardia presidencial, había oído, al parecer, que iba a ser destituido y decidió golpear primero, derrocando a Bazoum en julio de 2023 y declarándose líder de la junta militar.
En el caos que siguió, Bazoum pudo ponerse en contacto con sus aliados occidentales y regionales desde una habitación segura de su casa, lo que dió lugar una campaña diplomática para revertir el golpe. Encabezados por Nigeria, potencia regional, los líderes del bloque de África Occidental (CEDEAO) impusieron fuertes sanciones económicas y amenazaron con una invasión militar de Níger.
"El discurso público de la junta era que Francia estaba presionando a la CEDEAO", afirma Yahaya, de Crisis Group. A finales de año, las tropas francesas habían sido expulsadas de Níger. En cuanto a Estados Unidos, el tiempo corría, la "falta de confianza" provocaba un "deterioro gradual de las relaciones", aunque la administración de Joe Biden intentara inicialmente mantener un tono prudente. "Desde el principio, ellos [la junta] sabían que sería una relación difícil", continuó. "Nunca confiaron en que Estados Unidos apoyaría a una junta militar".
Una visita de la vicesecretaria de Estado estadounidense, Victoria Nuland, durante la que se le prohibió visitar a Bazoum, que estaba "prácticamente bajo arresto domiciliario", fue mal. Pero el verdadero punto de ruptura se produjo en marzo, tras una visita de altos funcionarios estadounidenses para hablar de la transición democrática.
El ejército declaró en la televisión nacional que los estadounidenses habían acusado a Níger de mantener "tratos secretos" con Rusia e Irán, amenazando con tomar medidas contra el país si no cortaba sus lazos con ambos países.
Según Yahaya, Estados Unidos actuó con "mano dura". "El tono de la reunión, en la que intentaron imponer las medidas, enfureció a los generales".
¿Qué hacían los Estados Unidos en Níger?
Se consideraba a Níger el último gran aliado de Occidente en la región del Sahel. Esta vasta extensión situada al sur del desierto del Sáhara que es el hogar de Boko Haram en Nigeria, así como de miembros de ISIL y Al Qaeda, que se habían expandido por el norte de Malí en 2012, y cuya violencia se extendió a Níger y Burkina Faso tres años más tarde.
La situación es crítica. En una cumbre de líderes africanos celebrada esta semana en Abuja, la vicesecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, señaló que la mitad de las 8.352 muertes causadas por el "terrorismo" en todo el mundo el año pasado se produjeron en el Sahel. El conflicto ha desplazado a millones de personas en toda la región.
Estados Unidos lleva en Níger desde 2012, cuando comenzó a realizar operaciones de vigilancia con drones. Amplió su presencia en 2018, con la construcción de la base aérea nigerina 201 en Agadez, con un coste de más de 100 millones de dólares. Durante la última década, Estados Unidos ha invertido cientos de millones de dólares en la formación del ejército de Níger.
Pero Estados Unidos sobrevaloró la fuerza de estos acuerdos. En realidad, el ejército nigerino llevaba mucho tiempo irritado por los términos del llamado Acuerdo sobre el Estatuto de las Fuerzas Armadas (SOFA) entre ambos países. Según Yahaya, Níger había solicitado en tres ocasiones que se revisaran esos términos. El mes pasado, la junta dijo que el acuerdo había sido "impuesto unilateralmente".
Según Rynn, de la RUSI, algunas de las cláusulas se consideraron "decididamente desiguales y explotadoras". A los militares les molestó especialmente que Estados Unidos no compartiera la información militar obtenida por los vuelos de drones en el espacio aéreo nigerino.
"Eso les tocó la fibra sensible", afirmó Rynn.
¿Por qué se ha implicado Rusia? Estados Unidos pierde y Rusia gana
Inmediatamente después de la toma del poder por Tchiani, los partidarios de la junta agitaron banderas rusas en las calles del centro de Niamey, lo que hizo sospechar que el Kremlin estaba detrás del golpe.
Pero aunque benefició claramente a Rusia, Rynn cree que el golpe estuvo "motivado por causas internas". Aunque es cierto, dijo, que las embajadas rusas en la región disponen de un arsenal de banderas para "capitalizar cualquier acontecimiento que... pudiera utilizarse para avergonzar a Occidente".
En cualquier caso, Rusia estaba presionando a puerta abierta, según los expertos. Los generales ya pidieron ayuda a Wagner para conjurar las amenazas de invasión de la CEDEAO. Ahora, el Cuerpo Africano -cuyo controvertido nombre recuerda a la fuerza expedicionaria de Adolf Hitler- se está ocupando del asunto, ayudando a Níger a construir un sistema de defensa aérea para que el país pueda controlar sus propios cielos.
Un partidario de la junta gobernante de Níger sostiene una pancarta con los colores de la bandera rusa en la que se lee "Viva Rusia, viva Níger y los nigerinos" al comienzo de una protesta convocada para luchar por la libertad del país y rechazar la injerencia extranjera en Niamey, Níger, el 3 de agosto de 2023 [Sam Mednick/AP Photo].
Según Yahaya, la apuesta del país por asegurar su espacio aéreo tiene menos que ver con la guerra contra los grupos armados y más con protegerse de Francia, que tiene un largo historial de intervencionismo en sus antiguas colonias africanas y mantiene un imperio monetario a través de la moneda vinculada al euro, el franco CFA. Además, señala, hay un elemento de "paranoia por su parte" (por la parte nigerina).
"Los yihadistas no poseen drones ni aviones", afirmó. "Hoy la primera prioridad del régimen es mantenerse en el poder. Saben que el divorcio con Francia puede ir muy mal.No creen que Francia se vaya sin devolver el golpe... De ahí el deseo de poseer un sistema de defensa antiaérea".
¿Cuál es el plan de Rusia?
Más allá de la ayuda militar, los detalles de la contrapartida siguen sin estar claros.
Un reciente informe del think tank RUSI, basado en documentos internos del gobierno ruso, revela que el modelo de "armas por oro" del país sigue muy vivo, pero con una estrategia geopolítica más meditada para Níger.
Según los documentos citados en el informe, el Cuerpo Africano planea ofrecer un "paquete de supervivencia del régimen" a los gobiernos clientes, intercambiando apoyo militar y diplomático por recursos. En Níger, Rusia pretende obtener concesiones para las minas de uranio, amenazando así el acceso de Francia a suministros para sus 56 reactores nucleares, que producen la mayor parte de la energía del país.
Nada de esto hace avanzar la soberanía nigerina, señalan los analistas. Pero Yahaya cree que los militares nigerinos no consideran a Rusia como una "presencia extranjera". "Con los rusos, es muy transaccional: dinero por servicios", afirmó. "Los ven como negocios temporales entre el gobierno nigerino y el gobierno ruso".
Según Rynn: "Níger ha dado la bienvenida a los instructores y el equipo rusos. Su gran esperanza es poder utilizarlos para cambiar las tornas", afirmó. "Pero el periodo de luna de miel terminará, y la gente dirá: '¿Dónde están los resultados de Rusia?". Cree que Rusia "poco a poco se verá arrastrada a proporcionar más apoyo a los militares".
Níger se ha unido a sus vecinos Malí y Burkina Faso -también gobernados por líderes militares desde los recientes golpes de Estado- para abandonar a Francia en favor de Rusia. El trío se comprometió a abandonar la CEDEAO en enero y ha formado un pacto económico y de defensa propio denominado Alianza de Estados del Sahel.
¿Qué harán ahora los Estados Unidos?
"La diplomacia a la antigua usanza es lo que [Estados Unidos] hizo mal", afirmó Yahaya.
"Si vienes como superpotencia y dictas comportamientos a la gente, no funciona. No hay que subestimar la determinación de la gente para hacer valer su soberanía. Si vienes a dictarles lecciones, no hay negocio".
Los funcionarios estadounidenses luchan ahora por mantener las botas sobre el terreno en la región, tanto en Níger como en Chad. Este último cuestionó recientemente un acuerdo que permitía a Estados Unidos llevar a cabo operaciones de seguridad dentro de sus fronteras, ordenándole detener las actividades en la base aérea Adji Kossei de Yamena, que también acoge a 1.500 soldados franceses. EE.UU. tiene actualmente unos 100 soldados de las Fuerzas Especiales en el país.
Las tensiones salieron a la luz en una carta filtrada este mes, lo que hizo especular con la posibilidad de que Chad estuviera intentando reforzar su posición de cara a las elecciones del 6 de mayo. "¿Están intentando renegociar con todo el mundo, hacer algunos movimientos iniciales duros... pero luego recalibrar y tener tratos más igualitarios con todo el mundo?", se preguntó Rynn.
Mahamat Adam Bechir
El jefe de la Fuerza Aérea Chadiana envió un mensaje al agregado de Defensa estadounidense advirtiendo a las fuerzas estadounidenses con base en la base aérea N'Djamena Adji Kossei que detuvieran inmediatamente sus actividades. #chad
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