A un año de las elecciones presidenciales de 2025, el gobierno de Paul Biya se prepara para todos los escenarios posibles. Tras las reuniones de varios estrategas del presidente en Etoudi, en marzo, sobre la conveniencia de organizar las próximas elecciones municipales y legislativas en 2026, a principios de julio se han celebrado dos reuniones.
La primera fue una conferencia de prensa, el 3 de julio, en la que el ministro de Administración Territorial, Paul Atanga Nji, atacó, sin nombrarlos, a dos líderes de la oposición: Maurice Kamto, presidente del Movimiento por el Renacimiento de Camerún (MRC), y Cabral Libii, del Partido Camerunés por la Reconciliación Nacional. El ministro también hizo un llamamiento a los periodistas y a los medios de comunicación en general para que muestren una mayor «responsabilidad» de cara a las elecciones presidenciales de 2025
El decreto divisorio
A continuación se celebró una segunda reunión, más discreta, con todo el aparato de seguridad del Estado.Asistieron el Secretario de Estado de Defensa (SED), representado por Galax Yves Landry Etoga; el Delegado General para la Seguridad Nacional, Martin Mbarga Nguélé; los ministros Joseph Beti Assomo (Defensa) y Paul Atanga Nji; y el Director General de Investigación Exterior, Jefe de Batallón Emmanuel Sako Eseye. Durante la reunión, el Ministro de Defensa declaró que «no habrá tolerancia» para quienes intenten crear disturbios antes, durante o después de las elecciones.
El prefecto del departamento de Mfoundi, Emmanuel Mariel Djikdent, le tomó la palabra.El 16 de julio, firmó una orden por la que se prohibía la entrada en su jurisdicción, Mfoundi, «a toda persona que llame a la sublevación contra las instituciones de la República, que insulte peligrosamente a estas instituciones o a sus representantes, o que emprenda acciones susceptibles de perturbar gravemente el orden público». Una medida drástica que provocó fuertes reacciones.
Maurice Kamto en pie de guerra
Cabral Libii ha denunciado «una deriva autoritaria llamativa e inaceptable, una grave violación de la Constitución». El diputado recordó que ni la ley de 1990 sobre el mantenimiento del orden público ni el decreto de 2008 que define las competencias de los jefes de circunscripción administrativa otorgan al prefecto la facultad de prohibir temporalmente a un ciudadano residir en un departamento de Camerún, ni siquiera en estado de emergencia. Esta decisión se tomó en un contexto político especialmente tenso.
En una rueda de prensa celebrada el 10 de mayo, Maurice Kamto, que quedó segundo en las elecciones presidenciales de 2018 y está decidido a probar suerte de nuevo en 2025, ha expresado su preocupación por el proceso de registro de votantes.Dos militantes de la Agrupación Democrática del Pueblo Camerunés (Rassemblement démocratique du peuple camerounais), el partido gobernante, también amenazaron en directo por televisión con un «golpe militar» en caso de victoria del MRC.Aunque Paul Atanga Nji no ha reaccionado , sí se enfadó por la promesa de Kamto de responder proporcionalmente a cualquier maniobra dirigida contra él.
La Matinale.
En la fotografia de cabecera: Paul Atanga Nji, ministro camerun.es de Administración Territorial.
.jpg)
